Los presupuestos re-recortadores de la Comunidad de Madrid

La semana pasada se presentaImagerón por segunda vez en lo que va de año los presupuestos regionales de la Comunidad de Madrid, que según pudo explicar Esperanza Aguirre en rueda de prensa, en principio son los definitivos, aunque hoy podemos saber preparan una tercera versión aún más dañina para Madrid, y que por supuesto, ahondan aún más en los re-recortes principalmente en Sanidad y Educación.

Además, para desviar la atención, aseguró que se bajará un 10% el sueldo a los altos cargos, incluida ella. Eso le sirvió para asegurar con desparpajo que ya no sabe ni lo que cobra. Por otro lado, se reducirá el 3,3% el salario a los 180.000 empleados públicos.

Sin embargo, lo que no cuenta es el recorte de un 10% que sufrirán los mileuristas interinos de la administarción y no son precisamente altos cargos, una medida que afectara a 10.000 empleados temporales. Y que intento ocultar con cortinas de humo.

Esto, es lo que pretende Esperanza Aguirre con sus presupuestos, lanzar cortinas de humo, mientras recorta en Sanidad, Educación y a los que menos ganan, mientras también recorta los impuestos precisamente a quienes más ganan, aumentandoles además los beneficios fiscales. De echo es tan evidente el modelo de recortar servicios a la mayoria e impuestos a la minoria que con el modelo fiscal de Gallardón mientras era Presidente, se generaban 3.000 millones de euros más que con los de Aguirre.

Una estrategia pensada para reducir progresivamente los ingresos y de esta manera reducir las prestaciones y servicios sociales, que los madrileños que no tienen de todo no se pueden pagar, servicios que son necesarios para que Madrid avande hacia un modelo sostenible pero de calidad, en lugar de avanzar al pasado retrocediendo en derechos y calidad de vida de los Madrileños.

El Canal de Isabel II, una difícil decisión

Lo bueno de la nueva edición de EL PAÍS digital es que con un  par de palabras clave puedes encontrar de una forma vistosa todas las noticias sobre un mismo tema. En el caso del tema por excelencia de la semana pasada, el de la privatización -uno no sabe hasta donde- del Canal de Isabel II hemos visto una nueva artimaña de Esperanza Aguirre.

Una artimaña pura y dura, ya que como dice que no ha encontrado un comprador para el 49% de las acciones del Canal va a constituir una nueva empresa pública, con su costoso consejo de administración, para que se haga cargo de esa parte del Canal, que es la más jugosa y lucrativa, de cara a venderla cuando la cosa mejore.

Un paso más en su política de desmantelamiento de los servicios públicos, como hemos ido denunciando en los últimos post de este blog.

No sé si en la época romana el agua tenía gestión privada pero que era un elemento clave del buen gobierno no me cabe duda. Aguirre está jugando, dentro de su estrategia política, además ha puesto entre la espada y la pared a los cuatro municipios principales de izquierdas de la región (Parla, Fuenlabrada, San Fernando de Henares y Rivas) amenazando con volver a un contrato de hace más de 30 años y por ende que en el interin de un contrato a otro pudieran existir problemas de suministro (con la revuelta social pertinente hacía estos ayuntamientos galos).

No es sencillo firmar el pre-acuerdo de entrar en una empresa pública de la que sólo se conoce un titular periodístico, menos lo es gobernar y quedarse un día sin agua en el municipio. Tengo mis dudas en este proceso, ¿es mejor por la ficticia aldea gala de Asterix y Obelix o someterse al destino final de Numancia?

Sin transporte.

Dentro del contexto de crisis económica, este tsunami que se quiere llevar todo por delante, el transporte público no es ninguna excepción. En la Comunidad de Madrid se da la circunstancia, buscada políticamente, de que la gasolina ha subido menos que el precio del transporte público.

En menos de un año dos subidas importantes en el abono de 10 viajes, un 50% en el precio del billete sencillo (siempre que no viajes más de cinco paradas -1,5km apróximadamente- ya que sino será un 100%), así como los abonos mensuales, hacen que la balanza entre usar el transporte público o el privado se desequilibre, aún más, hacia el segundo. Digo que aún más hacia el segundo porque el atractivo del privado a muchos ciudadanos y ciudadanas (nos) compensa.

El gobierno Aguirre, el del PP, el de la Comunidad de Madrid (el orden de los adjetivos es importante) continua con estas medidas en desmantelar los servicios públicos dentro de su ideología neoliberal con el argumento de compensar las cuentas públicas.

Yo (nosotros) me pregunto si es posible compensar las deudas públicas si con la subida de precios, la falta de trabajo y el desequilibrio en la balanza del transporte público-privado es más clara. ¿Sí el transporte sube no será más difícil a la ciudadanía elegir el transporte público?

Además, dentro de este despropósito de la política madrileña, ¿la población de Madrid a la que se le ha acercado el transporte público, «nuevos clientes», no compensa el coste/inversión de esas obras? En las líneas del medio-metro de los pueblos de la zona norte de la ciudad de Madrid está claro que no es así.

El transporte, y el resto de servicios públicos, no están en peligro están desmantelándose por Aguirre y el PP.

Si les interesa el tema del transporte les recomiendo el siguiente blog: Ecomovilidad.net un auténtico lujo

 

Repago también en las carreteras Madrileñas, tras la sanidad y la educación ahora a por el transporte por carretera

ImageEn estos días hemos podido escuchar como el ejecutivo central, el Gobierno de Mariano Rajoy, planteaba implantar un “pequeño coste en las carreteras Españolas”, sin embargo parece que quien finalmente lo llevara a cabo será el Gobierno de Esperanza Aguirre que una vez más utilizará a Madrid como campo de pruebas de políticas regresivas y que perjudican claramente la calidad de vida de los ciudadanos.

El Ejecutivo de Esperanza Aguirre defiende que los usuarios deben contribuir directamente al costo del mantenimiento de las carreteras madrileñas, sin embargo, no tiene en cuenta que los ciudadanos ya pagan por el uso de las carreteras y a lo que se les somete es a un doble pago, como se esta implantando en Sanidad, Educación y ahora Transporte.

Este sistema de pago por circular por carretera es un sistema superado desde la Edad Medieval cuando se debía pagar al pasar por un punto determinado y que en aquellos países donde se ha implantado a supuesto una muy importante perdida de circulación y un parón de la actividad económica, así como una merma en la seguridad vial al obligar a los conductores a buscar alternativas que se encuentren en peor estado.

La presidenta de la Comunidad de Madrid argumenta que se gastan mucho en mantenimiento de carreteras, sin embargo la mayor parte del presupuesto se destina a pagar a las constructoras que construyeron algunos tramos de las carreteras madrileñas y que finalmente cuesta 4 veces más de lo que costaría si la hubiese construido la propia administración madrileña, lo que supone un gran negocio para las constructoras. Así además se impulsa las autopistas que son única y exclusivamente de peaje y cuyas concesionarias tiene unos déficit muy importantes necesitando de mayor afluencia de vehículos.

A todo esto cabría añadir que el gobierno regional destina tan solo uno de cada cinco euros a asfalto, construcción de carreteras y adecuamiento de estas, sin embargo no se especifica ni aparece donde ha ido aparar el resto del dinero que supuestamente debería haber gastado la consejería de transportes y finalmente no hizo.

Una mejor gestión y control del gasto, un mayor compromiso con la ciudadanía en la mejora de carreteras y construcción de nuevas vías, en lugar de apoyar a las empresas constructoras o concesionarias de las autovías madrileñas. Permitiría no solo que no fuese necesario pagar nuevos peajes, sino mejorar la calidad de las carreteras, evitando muchos accidentes en varios puntos negros a los ciudadanos madrileños.

Las propuestas “populares” del futuro, para avanzar al pasado…

En unos días se celebrará el XV Congreso Regional del Partido Popular de Madrid, en el que sin lugar a dudas volverá a ser reelegida Esperanza Aguirre como Presidenta del PP de Madrid.

Sin embargo, lo alarmante no su candidatura, la cual era de esperar, si no el programa o “líneas maestras” que en este congreso proponen para llevar acabo en la Comunidad de Madrid o en todo caso, impulsar ante el PP Nacional para que las puedan llevar acabo en caso de que excedan de las competencias atribuidas al Gobierno Regional.

Algunas de estas propuestas son, limitar el dinero con el que se financian las Universidades. Al parecer no han sido suficientes los recortes y la carestía a la que siempre han sometido a la Universidad Pública, si no que se pretende imponer un sistema, que las asfixie finalmente, para así, deban echarse en brazos de las empresas privadas para lograr financiación a proyectos y estudios concretos. Logrando limitar de esta manera el número de grados a los que se pueda optar así como el acceso a ellos.

Pero para esto también se hacia necesario, para lograr rematar el sistema público de universidad, el limitar las becas, y de esta manera, según su discurso, asegurar y favorecer la excelencia y calidad de la enseñanza. Discurso viciado que intenta una reinterpretación de la realidad, ya que lo que en realidad pretenden, es elitismo y dureza, para limitar de esta manera la llegada de la gran mayoría de la población a las instituciones que, como la Universidad, han considerado patrimonio de las élites y grupos minoritarios.

Con estas iniciativas, pretenden asemejar el sistema Universitario Público al sistema de colegios Concertados que operan en muchos lugares, principalmente en la Comunidad de Madrid, y que finalmente terminan seleccionando a los estudiantes, en lugar de ser los estudiantes los que tengan la capacidad de elegir, qué estudiar y en qué centro educativo o universitario.

A esto lo han bautizado como libertad de elección, pero nunca terminan de definir de quien…, ya que tan solo quienes tengan capacidades o recursos suficientes, tendrán la oportunidad de estudiar en la Universidad, y en muchos casos, tan solo en aquellos estudios a los que se les haya prestado la suficiente financiación, al considerarles que estaban lo suficientemente vinculados al mundo laboral y la empresa privada.

Estas iniciativas se suman o otros muchas como el tarifazo en las matriculas de Universidad o la anemia de recursos a las que se les ha estado sometiendo a las Universidades en la Comunidad de Madrid principalmente, para lograr finalmente su objetivo, pretender la educación como un privilegio, no como un derecho, y mantener así unas estructuras de poder en las que sea difícil o inexistente, una igualdad real de oportunidades para todos.